Cuando se creó el primer pez transgénico en los años noventa, investigadores en laboratorios y empresas de acuicultura se han concentrado en peces modificados genéticamente que crezcan más y necesiten menos alimento. Empresas biotecnológicas han conseguido variedades de salmón, trucha, carpa, tilapia, pez plano del Ártico y otras especies comerciales a las que la alteración de su código genético les ha conferido una mayor tasa y velocidad de crecimiento, más resistencia a enfermedades, mayor adaptación a condiciones ambientales distintas de las suyas y unas necesidades alimenticias significativamente inferiores.
Científicos han introducido genes de la hormona del crecimiento humano y de animales en varias especies de peces causando un crecimiento acelerado. Otros científicos estan trabajando para obtener truchas transgénicas insertando en el ADN de la trucha un gen proveniente del ratón para darle cierta inmunidad contra la toxicidad a los metales, también se le injertará un gen de rana para que su organismo produzca globina, y así sea capaz de vivir en estanques con poco oxígeno haciendo que su crianza sea más fácil.
Por otra parte, en Canadá se han realizado estudios para modicar al salmón del Atlántico insertando el gen de crecimiento del salmón del Pacífico. Éste salmón, crece de 4 a 6 veces más rápido que un salmón normal. Otra especie marina desarrollada transgénicamente es el “supersalmón” que crece en menor tiempo que el natural hasta y puede llegar a tener hasta 6 veces su tamaño.
Sin embargo hay un alto riesgo al criar estos peces transgénicos ya que se puede dar el caso de que puedan escapar al medio ambiente, y estos al haber sido modificados para poder sobrevivir y reproducirse rápidamente en un medio natural, podrían desplazar a las especies naturales, haciendo progresivo su extinción. Hay otras situaciones que ponen de manifiesto los riesgos asociados al escape de peces transgénicos en el medio ambiente, ya que al incrementar su tasa de crecimiento también se aumentan sus necesidades de alimentación diaria, se puede producir un efecto devastador en la naturaleza, especialmente cuando las especies modificadas por transgénesis son predadoras, ya que afectarían la ecología marina en general.
No obstante, no todo lo relacionado con peces transgénicos es perjudicial, también se han estado realizando estudios y experimentos en los cuales se están modificando peces para que estos puedan ayudar a prevenir enfermedades que nos afectan, tal es el caso del pez cebra, el cual ha sido modificado genéticamente para que su carne ayude a prevenir la hepatitis B.
Como vemos la producción de peces transgénicos es un tema muy polémico, ya que tiene sus ventajas y desventajas, pero esperemos que se sigan realizando estudios para que se pueda garantizar la calidad de este producto y que no sea dañino para el hombre, y tampoco que no afecte a otras especies naturales para que los ecosistemas mantengan su equilibrio.
Ajalcriña Bocangel, Edgar Joel
Bibliografia :
- Mis Peces.Com (www.mispeces.com)
- GloFish (www.glofish.com)
- NewScientist (www.newscientist.com)
- http://www.enbuenasmanos.com/articulos/muestra.asp?art=1249
- http://www.greenpeace.org/raw/content/espana/reports/peces-transgenicos.pdf
- http://www.greenpeace.org/raw/content/argentina/bosques/transgenicos/peces-transgenicos-mas- info.pdf
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